El pasado 1 de Enero de 2016 entró en vigor el Reglamento UE nº 167/2013 del Parlamento Europeo y del Consejo relativo a la Homologación de tipo Europea de los vehículos agrícolas y forestales. Este reglamento sustituye a la antigua Directiva 2003/37CE, bajo la que se homologaban de tipo europeo ciertos tipos de tractores.
La principal diferencia del nuevo reglamento es que permite, no solo mediante la homologación de tipo sino a su vez por la existencia de reglamentos delegados que confieren contenido técnico a la misma, la obtención de homologaciones europeas de tractores, remolques y máquinas agrícolas y/o forestales, mientras que, anteriormente, tan solo los tractores podían optar a la homologación de tipo europea.
Sin embargo, la homologación europea solo es obligatoria para ciertos tipos de tractores, permitiéndose a los fabricantes del resto de vehículos a los que es de aplicación, elegir entre realizar esta homologación europea o cumplir con los requisitos nacionales exigidos. El motivo principal para que un fabricante opte por una homologación nacional o una homologación europea dependerá de la previsión de exportación de sus vehículos a otros estados miembros, ya que el procedimiento de homologación europea es único y válido en todos los países de la Unión Europea (UE). Teniendo en cuenta las consideraciones anteriores y para una armonización total es conveniente que una empresa con vocación y desarrollo internacional realice sus homologaciones mediante el procedimiento de homologación de tipo europeo.
Desde GMR Homologaciones somos conscientes de la dificultad que supone para un fabricante o importador estar al día de todas las novedades legislativas que se producen, por lo que, uno de nuestros objetivos principales es mantener siempre a nuestros clientes informados de los requisitos técnicos y documentales necesarios a implementar debido a cambios normativos. De este modo, nuestro cliente, con la suficiente antelación, puede adaptar no sólo su documentación de homologación a la última legislación aplicable, sino también, planificar su estrategia comercial.
Un asesoramiento correcto debe tener la finalidad de encontrar las mejores soluciones desde el punto de vista estratégico, económico y documental. En GMR ofrecemos a nuestros clientes contratos anuales de asesoramiento técnico que les permiten, entre otros, disponer en todo momento de la información sobre las novedades legislativas, mantener sus homologaciones al día, así como cumplir con los requisitos de la Conformidad de la Producción.
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